Reflexión espiritual y Política: ¿Es el político de hoy, Sacerdote, levita o samaritano

Por. Dr. Miguel A. De La Cruz
Sección de Opinión

¿Cuantos conceptos culturales y religiosos tuvo que enfrentar el señor Dios? El judío entendía que no todo ser humano era su prójimo; así enseñaban los rabinos, maestros de la ley de su tiempo.
Para el israelita, solo era su prójimo; el otro israelita. La elección maravillosa que el señor había hecho con ellos, afecto mucho su ego; se consideraban su especial tesoro, nación santa, pueblo protegido por Dios, quienes habitarían la tierra prometida.
Había un ego religioso muy grande; así se sentían. El cerco Majestoso y fuerte de Dios, los milagros y proezas en medio del pueblo, los grandes profetas, las manos poderosa y aplastante con las que muchas veces los protegió; los convirtió en personas apartadas y egocéntricas, se sentían orgullosos de ser judío y no ser como los demás. Eran altivos, miraban de lejos a los otros, no se acercaban, ni para hacerles el bien, se había quedado con el amor que había recibido de Dios y no eran capaces de reproducirlos en los demás.
¿Puede un pecador ser tu prójimo? ¿ el Político ¿Una mujer? ¿El puro? ¿El impuro?, ¿el leproso inmundo¿ ¿el ladrón? ¿La adultera? ¿Muchas preguntas giraban en la mente del judío al pensar en el prójimo. ¿Quién es el prójimo¿ le preguntaron, ocultando sus prejuicios los discípulos.
Jesús contesto: Un pobre hombre que cayó en las manos de los ladrones, le robaron y dejaron medio muerto en el camino, paso un sacerdote, un levita y lo ignoraron; pero un samaritano fue movido a misericordia, lo curo, lo traslado, y cuido de el y pago dinero por su atención.
¿Quién es el prójimo de este hombre herido injustamente en encamino? Pregunto el Maestro: el que uso misericordia, le respondieron, ¨ ve, y haz tú lo mimo.
Que hacer ante el prójimo necesitado? ¿Me escurro y lo ignoro como los sacerdotes y levitas? O ¿me acerco y lo ayudo?.......
Pasar de largo es fácil, dar la mano puede ser difícil, pero esta son
las demandas del reino de Dios.
Tomemos este ejemplo, imitemos al samaritano y no al sacerdote. Todo el mundo es nuestro prójimo.
Ahora, compare a los políticos de hoy en día, ¿SON SACERDOTE, LEVITA O SAMARITANO?
Y usted ¿CUAL ES?