Las consecuencias de 'Rápido y Furioso' se pagarán por años

Por la Redacción Central

WASHINGTON, DC - El fiscal general de Estados Unidos, Eric Holder, reconoció que el Departamento de Justicia dio al Congreso información imprecisa sobre “Rápido y Furioso” y aceptó la responsabilidad final por la “fracasada” operación.
Ante el Comité Judicial de la Cámara de Representantes y citado por la agencia mexicana Notimex, Holder aseguró empero que estas fallas no fueron intencionales, sino resultado de errores en la verificación de la información inicial que sirvió de base para las misivas enviadas a legisladores.
“Entiendo que líderes en el Departamento fueron informados sobre las inapropiadas tácticas empleadas en esta operación una vez que éstas se hicieron públicas”, dijo.
“En última instancia yo soy responsable de todas las acciones que ocurren dentro del Departamento, pero si ven lo que pasó con Rápido y Furioso para evaluar mi desempeño, hay que ver lo que hice una vez que me enteré de estos asuntos”, citó la agencia.
Holder, quien calificó la operación de “fracasada” aunque con “metas aplaudibles”, respondió así al señalamiento del presidente del Comité de Supervisión de la Cámara, Darrell Issa, de que la responsabilidad final del fracaso del operativo recae en el procurador general.
En tanto, citado por el periódico mexicano Excélsior, Holder admitió que “los efectos de este operativo seguirán, con armamento usado en crímenes, a ambos lados de la frontera”.
Por separado, el republicano James Sensenbrenner se pronunció por el despido del procurador adjunto de la división criminal del Departamento de Justicia, quien fue el funcionario que envió la información con imprecisiones al Congreso.
“Deben rodar varias cabezas; Lanny Breuer debe ser despedido”, dijo Sensenbrenner también citado por Notimex.
Sin embargo Holder rechazó la sugerencia de que funcionarios del Departamento de Justicia hayan mentido al Congreso y aseguró que no contaban con la información exacta cuando negaron la existencia de un programa de trasiego ilegal supervisado de armas a México.
Holder, quien se ha convertido en blanco político de los republicanos tras la revelación del operativo, consideró en cambio que la pesquisa legislativa de “Rápido y Furioso” parece en ocasiones un espectáculo para anotarse “puntos políticos”.
“Los estadounidenses merecen algo mejor. Es tiempo de un nuevo diálogo sobre estos importante temas, pero uno que sea respetuoso, responsable y factual”, insistió.
El funcionario criticó también recientes acciones legislativas que, dijo, podrían tener un negativo efecto sobre el trabajo de las agencias de seguridad. En particular mencionó el voto en la Cámara de una iniciativa que impide a esas agencias ser informadas por armerías en la frontera sobre ventas múltiples de armas semiautomáticas.
“Por la seguridad de los agentes de ley no podemos permitir que los errores trágicos de Rápido y Furioso se conviertan en un espectáculo político o una serie de oportunidades mediáticas”, precisó.
La audiencia sobre “Rápido y Furioso” fue suspendida temporalmente para permitir la participación de los legisladores en cuatro votos en el pleno de la Cámara de Representantes.