miércoles, 16 de mayo de 2012
El Senado de EEUU rechaza el proyecto presupuestario para 2013 de Obama
Redacción Central
WASHINGTO, AFP.- El Senado de Estados Unidos rechazó hoy por unanimidad el presupuesto para 2013 propuesto por el presidente Barack Obama y derribó una serie de alternativas republicanas, asegurando así una prolongada batalla fiscal en el año electoral.
La cámara alta, controlada por los demócratas, no ha aprobado en tres años una resolución presupuestaria que disponga objetivos de gastos e ingresos para el año siguiente, mientras los republicanos han subrayado el fracaso de la administración Obama a la hora de asumir un enfoque proactivo de responsabilidad fiscal.
El Senado votó por 99 votos a cero contra el presupuesto de 3,8 billones de dólares solicitado.
Los demócratas hicieron hincapié en que la votación era innecesaria porque los legisladores habían incluido un tope al gasto el pasado verano en el marco de un acuerdo para aumentar el techo de la deuda pública.
En marzo, la Cámara de Representantes rechazó la propuesta de presupuesto de Obama por 414 votos a cero.
El equipo de campaña de Mitt Romney, el candidato republicano que posiblemente competirá con Obama en los comicios de noviembre, aprovechó inmediatamente este miércoles la votación para señalar "la falta de seriedad" para afrontar los retos presupuestarios.
"Con más de 500 miembros del Congreso opuestos a su presupuesto -y ni uno sólo apoyándolo-, los fracasos del presidente en materia de liderazgo y de responsabilidad fiscal son obvios para todos", dijo el director de campaña de Romney, Lanhee Chen.
El borrador del proyecto presupuestario presentado en febrero por el presidente incluía una reducción del déficit de cerca de 4 billones de dólares para 2022, junto con aumentos de impuestos a los ricos y topes de gastos en algunos organismos del Estado.
Un plan republicano alternativo presentado este año por el congresista Paul Ryan -el presidente de la Comisión Presupuestaria de la Cámara de Representantes-, que pretendía equilibrar el presupuesto en las próximas tres décadas, en parte a través de profundos recortes en salud y servicios sociales, también fue rechazado en el Senado. Había sido aprobado hace un mes en la cámara baja.