MUNDO.- Walter Palmer es dentista y fue señalado como el cazador furtivo
que terminó con la vida de Cecil. En su perfil de la red social, los
usuarios comenzaron a dejarle mensajes.
Finalmente se conoció la
identificad del cazador furtivo
que terminó con la vida de Cecil, el león más famoso y querido
de África, quien fue ultimado en las afueras de
una reserva en Zimbabue. Se trata de Walter Palmer, un dentista
de Minneapolis que tiene como pasatiempo preferido el uso del arco y flecha.
La noticia fue
confirmada por Johnny Rodrigues, responsable del equipo de Conservación de Zimbabwe.
Palmer era intensamente buscado en el país africano luego de que se supiera que
había matado a Cecil, un león muy conocido en ese país que fue engañado
por el dentista norteamericano para que abandonara su parque y así poder
cazarlo
La noticia se conoció
días después del deceso del afamado animal, que murió desangrado. Palmer también decapitó al león y le sacó la piel como trofeo.
Sin embargo, no se supo
si finalmente pudo trasladarla consigo a los Estados Unidos. Por cazar furtivamente a Cecil,
Palmer habría pagado entre 46 y 55 mil dólares a los guías
del safari que lo acompañaron en la travesía.
Palmer, quien trabaja como dentista y pertenece a
un círculo de profesionales muy reconocido de Minneapolis,
está casado y tiene dos hijos.
En su perfil
de Facebook, Palmer confirma que le
gusta la “vida
salvaje“. Pero los comentarios que recibió por parte de los
usuarios de la red social no fueron muy elogiosos. “Asesino“,
“deberías
avergonzarte“, “eres un enfermo, busca ayuda“, “asesino de animales“,
“eres
patético“, “mereces sufrir como el león“, “maldito pedazo de mierda”
son sólo algunos de los comentarios que recibió en pocos minutos el dentista
de Minneapolis,
luego de que se conociera su identidad como el cazador a Cecil.
Cecil, el león de 13 años,
fue encontrado decapitado y sin piel días después de su deceso. Para su
monitoreo, tenía un collar de GPS que era controlado por científicos. Palmer se
lo arrancó para evitar su seguimiento. Vivió sus últimos años en el parque nacional
Hwange, donde se hizo famoso y querido.