lunes, 28 de diciembre de 2015

EEUU celebra "gran derrota" de EI en Ramadi y urge a asegurar su recuperación

El secretario de Estado de EE.UU., John Kerry
Redacción Central

EE.UU.- El secretario de Estado de EE.UU., John Kerry, afirmó hoy que la ciudad de Ramadi aún no está "totalmente controlada" por las fuerzas iraquíes, aunque aseguró que los combatientes del Estado Islámico (EI) han sufrido una "gran derrota".
"Aunque Ramadi todavía no está totalmente controlada y otras partes de la ciudad todavía deben ser retomadas, la bandera iraquí ahora ondea sobre la sede del gobierno provincial y las fuerzas enemigas han sufrido una gran derrota", indicó Kerry en un comunicado.
Expresó, asimismo, su admiración por "la determinación, coraje y capacidad de las fuerzas iraquíes para acercar el día en el que la ciudad pueda ser devuelta a las familias que tuvieron que huir del terror de EI", y apuntó que estos esfuerzos han sido "respaldados" por ataques aéreos de EE.UU. y la coalición internacional.
De este modo Kerry matizaba el anuncio realizado hoy por el Gobierno de Irak de la "liberación total" de Ramadi, capital de la provincia de Al Anbar (oeste), después de una semana de combates contra el grupo yihadista EI, que la conquistó en mayo.
El jefe de la diplomacia estadounidense remarcó que "expulsar al EI de áreas que ha ocupado es una parte central de la estrategia de seguridad de Irak, pero también es vital reconstruir y estabilizar las zonas que han sido liberadas".
Por ello, remarcó que EE.UU. y los miembros de la coalición internacional se han comprometido a entregar 50 millones de dólares al fondo de estabilización de las Naciones Unidas para apoyar estas tareas.
Kerry indicó que la derrota de EI en Ramadi "no es un hecho aislado", y lo enmarcó en los golpes sufridos por los yihadistas este año en otras ciudades iraquíes como Tikrit, Baiji y Sinjar, así como en el norte de Siria.
La pérdida de Ramadi supone un duro golpe para el EI y permitirá a las fuerzas gubernamentales centrarse en la liberación de Mosul, el principal feudo del grupo extremista en Irak, situado en el norte del país.