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Las diferentes
informaciones que tanto las autoridades gubernamentales, los ejecutivos de
Polyplas y hasta la propia Comisión de los Derechos Humanos no coinciden con la
veracidad de lo que realmente esta pasando, llego la hora de que los medios de
comunicación, llámese directivos de medios que respetan su profesión a decir la
verdad, esa fabrica posee una matriculación de empleados de mas de 300
personas, ya no vamos a permitir que la verdad se siga ocultando. EDR
Derechos Humanos dijo que el Gobierno ha exhibido un actitud de “genuflexión” ante la actitud “arrogante” del propietario de la empresa siniestrada, el empresario Manuel Díez Cabral, quien se considera por encima de las leyes.
“Lamentamos el silencio cómplice del ministro de Trabajo, Winston Santos, ante una tragedia que afecta de forma tan grave a la clase trabajadora dominicana y que trae sombras preocupantes sobre los protocolos de seguridad y prevención de desastres en las empresas privadas”, dijo el presidente de la comisión, Manuel María Mercedes.
La entidad recordó que el país es signatario de dos importantes convenios de la Organización Internacional del Trabajo (OIT), en materia de protección y seguridad en el trabajo.
Protocolo productos químicos
Uno de estos convenios, dijo Mercedes, atañe a los productos químicos, el cual indica precisas responsabilidades de los empleadores en el caso de las empresas donde son utilizados productos químicos por sus empleados o donde estos estén en contacto directo con productos químicos.
“Consideramos que se hace necesaria y urgente la creación de una comisión de seguimiento integrada por autoridades, familiares de las víctimas y el Defensor del Pueblo, para que de forma inmediata se pueda manejar la situación con la altura y el respeto a las víctimas y darle seguimiento a los daños y perjuicios de los afectados”, consideró Mercedes.
El activista también solicitó a las autoridades correspondientes la realización urgente de un plan de ordenamiento territorial del Gran Santo Domingo disponiendo el traslado de empresas peligrosas hacia las afueras de la ciudad, para que tragedias como estas no vuelvan a repetirse.