WASHINGTON.- El Departamento de
Estado confirmó hoy la dimisión del enviado especial de EE.UU. para el
cierre del centro de detenciones de Guantánamo, Cliff Sloan, y destacó
su trabajo en el traslado de presos a terceros países para lograr este
objetivo.
“Nos deja muy bien encarrilados y con un camino
claro hacia la reducción de la población de detenidos de manera
responsable y para cerrar, en última instancia, el centro de detención”,
dijo la portavoz adjunta del Departamento de Estado, Marie Harf.
Sloan, que volverá al sector privado, fue
designado en junio de 2013 como encargado de coordinar desde el
Departamento de Estado los esfuerzos para cerrar la prisión para
sospechosos de terrorismo, una promesa electoral del presidente
estadounidense, Barack Obama.
Su objetivo era estar entre doce y dieciocho meses
en el cargo, plazo que ha cumplido este mes, explicó Harf en la rueda
de prensa diaria del Departamento de Estado, en la que consideró
“inexactas” las informaciones de que se haya marchado “frustrado” por la
lentitud de los progresos para cerrar Guantánamo.
“Creo que es todo lo contrario. En todo caso,
hemos visto un impulso con algunas de las recientes transferencias de
detenidos y hay más en camino”, afirmó la portavoz adjunta.
El diario The New York Times, que cita
funcionarios cercanos a Sloan, señala que la renuncia se debe a su
frustración por la lentitud del Departamento de Defensa en la
transferencia de los presos que cuentan con el visto bueno para su
traslado.
Un extremo que rechazó el propio Sloan en una
entrevista con el diario, en la que afirma que su intención desde un
principio era estar 18 meses máximo en el cargo y considera que, “en
estos momentos, estamos en condiciones de ver un gran progreso”.
En la actualidad, quedan 132 detenidos en el
centro abierto por la Administración de George W. Bush tras los
atentados del 11 de septiembre de 2001 en EE.UU., para albergar a los
detenidos sospechosos de terrorismo.
Harf señaló que, cuando Sloan asumió su cargo,
había 166 reclusos en el centro de detenciones de Guantánamo y en los
dos años precedentes solo se había aprobado el traslado de cuatro
detenidos, mientras que, en este periodo, se han transferido 34.
En este sentido, destacó su “liderazgo” y su
“habilidad para liderar negociaciones diplomáticas”, que han llevado a
que terceros países acojan a los presos.
Además destacó que su labor ha sido “central en
los esfuerzos exitosos de la Administración para trabajar con el
Congreso, a fin de cambiar la ley que devolvió al poder ejecutivo cierta
flexibilidad para transferir a los detenidos al extranjero”.
De momento no hay un sustituto pero, según Harf, se anunciará “pronto”.
En un comunicado, el secretario de Estado, John
Kerry, alabó el trabajo y la eficiencia del diplomático, y aseguró que
le “gustaría tener cien Cliff Sloan”.
Kerry destacó el “enorme progreso” realizado en
los últimos meses para el cierre de Guantánamo, “en gran medida gracias a
Cliff”, de quien dijo que ha sido un “habilidoso negociador” con los
países aliados para lograr el traslado de 34 presos, “con más en
proceso”.
Las trasferencias más recientes se realizaron este
mes con la vuelta de cuatro detenidos afganos a su país, y un grupo de
seis reos que Uruguay recibió en calidad de refugiados