Variedades
SANTO FOMINGO/- En los
tiempos del descubrimiento de América, barcos piratas saqueaban los mares del
Caribe. Hacia 1586 Santo Domingo sufría el ataque pirata más devastador del
nuevo mundo y con él, inició la leyenda que ha perdurado fantástica por más de
diez siglos.
Cuenta la leyenda que
Acarix, un indio de los taínos y Alfonso de Alzo, un soldado español, se
unieron para proteger los tesoros de la Hispaniola iniciando la alianza
clandestina que hoy conocemos como Los custodios de la Lis.
Por debajo de las
atarazanas construidas como arsenales para las naves que
desembarcaban en el puerto de Santo Domingo, se encuentran las primeras obras hidráulicas del período colonial, pero en sólo una, se halla el acceso a estas alcantarillas, en sólo una se escondían los valientes custodios, en sólo una está el túnel que burlo a los bandidos y guardó por más de cuatro siglos el tesoro escondido por los Custodios de la Lis.
desembarcaban en el puerto de Santo Domingo, se encuentran las primeras obras hidráulicas del período colonial, pero en sólo una, se halla el acceso a estas alcantarillas, en sólo una se escondían los valientes custodios, en sólo una está el túnel que burlo a los bandidos y guardó por más de cuatro siglos el tesoro escondido por los Custodios de la Lis.
Entonces, en 1972 un
visionario amante de la ciudad colonial de Santo Domingo restaura e inaugurara,
en el mismo arsenal que fuera el hogar de los Custodios de Lis, El Restaurante
Atarazana que se ofrece para ti y te muestra el tesoro.
¡La leyenda tiene vida!
Puedes tocarla, sentirla y saborearla.
Hoy día, exquisitamente decorado al estilo siglo XVI, es el lugar donde usted puede vivir una experiencia colonial inolvidable, disfrutar de un exquisito menú fusión internacional y de un ambiente único en la zona colonial. La vista exclusiva del Alcazar de Colón nos transporta al tiempo en que el restaurante fue la armería; con 500 años de historia, hoy seguimos esa tradición pues continuamos siendo un arsenal, pero, de la mejor propuesta culinaria y de los mejores momentos.
Hoy día, exquisitamente decorado al estilo siglo XVI, es el lugar donde usted puede vivir una experiencia colonial inolvidable, disfrutar de un exquisito menú fusión internacional y de un ambiente único en la zona colonial. La vista exclusiva del Alcazar de Colón nos transporta al tiempo en que el restaurante fue la armería; con 500 años de historia, hoy seguimos esa tradición pues continuamos siendo un arsenal, pero, de la mejor propuesta culinaria y de los mejores momentos.
La magia y el romance lo
han convertido en uno de los lugares predilectos para la celebración de eventos
especiales como bodas y cumpleaños donde los momentos se convierten en parte de
la historia, y la magia envuelve a los protagonistas.
Restaurante Atarazana se caracteriza por brindar a sus clientes un servicio excelente y de calidad, comprometido para ofrecer una fantástica experiencia en un lugar con clase y especial atención a los detalles, sustentada en esta arquitectura del siglo XVI.
Salón de Armas decorado con muebles de la época, mural de armas del siglo XVI y la mejor vista del Alcazar de Colón, área interior con techo panorámico y climatizado, espacio de ensueño donde estarás bajo la luna y las estrellas y terrazas coloniales abiertas que complementan un majestuoso montaje.
Restaurante Atarazana se caracteriza por brindar a sus clientes un servicio excelente y de calidad, comprometido para ofrecer una fantástica experiencia en un lugar con clase y especial atención a los detalles, sustentada en esta arquitectura del siglo XVI.
Salón de Armas decorado con muebles de la época, mural de armas del siglo XVI y la mejor vista del Alcazar de Colón, área interior con techo panorámico y climatizado, espacio de ensueño donde estarás bajo la luna y las estrellas y terrazas coloniales abiertas que complementan un majestuoso montaje.
El restaurante La Atarazana
es considerado como el más hechizante de Santo Domingo en la zona colonial.
Para mas informacion: Tel.: 809-689-2900, Calle Atarazana nº 5 – Santo Domingo, República Dominicana