martes, 20 de diciembre de 2016

Observación de DM a ley criminaliza aborto provoca variadas reacciones

Presidente Danilo Medina
Redacción Central'

SANTO DOMINGO.- La decisión del presidente dominicano, Danilo Medina, de observar el nuevo Código Penal debido a la penalización del aborto en todos los supuestos, provocó reacciones a favor y en contra.
El Senado, controlada por el gobernante Partido de la Liberación Dominicana (PLD), aprobó la semana pasada las modificaciones al Código Penal que dispone penas de hasta tres años a las personas que incurran en el aborto, para quienes lo causen, incluyendo al médico, enfermera, partera, cirujano, farmacéutico u otro profesional.
En 2014 se aprobó un texto similar pero Medina observó la pieza con el propósito de que se estableciera en qué situaciones se podía permitir.
Medina volvió a hacer lo propio el lunes y sugirió al Congreso Nacional que se aboque a reconsiderar el tema del aborto y apruebe que este se produzca en determinadas circunstancias.
Margarita Cedeño, Fidel Lorenzo y Sergia Galván
Esas variables enunciadas por el mandatario se refieren a que la madre pueda abortar cuando el embarazo sea producto de violación, rapto, estupro o incesto, que su interrupción se realice dentro de las primeras 12 semanas de gestación, y siempre y cuando el hecho haya sido denunciado o se compruebe que la víctima fue imposibilitada de hacerlo.
También, cuando una malformación congénita del feto, previa certificación médica, demuestre que la vida del concebido se considere inviable; además, cuando se agoten todos los medios “científicos y técnicos” disponibles para salvar ambas vidas, “hasta donde sea posible”.
La vicepresidenta dominicana, Margarita Cedeño, señaló en un artículo publicado en el Listín Diario, que “es evidente” que el tema del aborto “merece ser llevado a la mesa del debate, donde todos los sectores nacionales puedan ser escuchados, de manera tal que la decisión final sea el resultado del análisis profundo de la realidad social que vive el país”.
En ese sentido, dijo que si el debate continúa, el Poder Ejecutivo “debe considerar someter tan importante decisión a la voluntad popular” tal y como lo establece el artículo 210 de la Constitución que contempla las consultas populares.
Por su lado, Sergia Galván, de la Colectiva Mujer y Salud, destacó la decisión del presidente Medina de vetar el código penal, “atendiendo a la salud, la dignidad, los derechos y la integridad de las mujeres”.
“Obligar a una mujer a llevar a término un embarazo forzado producto del crimen de violación es cruel, inhumano y de desprecio a las mujeres”, añadió.
Sin embargo, representantes de las iglesias reprocharon la iniciativa del gobernante e, incluso, el presidente del Consejo Dominicano de Unidad Evangélica (Codue), Fidel Lorenzo, llamó “abortista” a Medina.”Creo que, sin dudas, tenemos un presidente abortista en Palacio, este insiste en que se viole la Constitución”, escribió Lorenzo en Twitter.
De su lado, Raúl del Río, director de la Organización Internacional de Lucha contra la Hambruna y Promoción del Desarrollo (OXFAM) en Santo Domingo, manifestó que “esa decisión muestra coherencia con los planteamientos de justicia social y derechos humanos contenidos en la Constitución de la República Dominicana y los compromisos internacionales asumidos y ratificados por este país”.
 “Nos alegramos de que el presidente Danilo Medina haya observado el Código Penal, dado que quienes son más afectadas por los abortos inseguros son las mujeres más pobres, quienes enfrentan mayores dificultades para ejercer sus derechos, en especial el derecho a la salud”, dijo.
Recordó que República Dominicana es uno de los siete países en el mundo que aún penaliza totalmente el aborto.
“La realidad nacional e internacional demuestra que la penalización absoluta no reduce ni elimina el número de abortos, sino todo lo contrario, aumenta la mortalidad materna, dada las condiciones de insalubridad y clandestinidad en que se practica”, precisó Del Río en in documento enviado a ALMOMENTO.NET.
Agregó que “está demostrado que en los países donde se han implementado legislaciones más flexibles, acompañadas de políticas de salud y educación sexual que faciliten el acceso a métodos anticonceptivos y a información oportuna, es donde se ha reducido sustancialmente el aborto”.