Redaccion Central
WASHINGTON.- El presidente de Estados Unidos, Barack Obama, ha comparecido este domingo para dar sus condolencias por las 50 víctimas mortales del tiroteo en un club gay de Orlando, Florida, y para calificar el ataque como un "un acto de terror y de odio".
WASHINGTON.- El presidente de Estados Unidos, Barack Obama, ha comparecido este domingo para dar sus condolencias por las 50 víctimas mortales del tiroteo en un club gay de Orlando, Florida, y para calificar el ataque como un "un acto de terror y de odio".
Ha definido el ataque como "la peor matanza por arma de fuego en Estados Unidos", y ha dicho que podía haber ocurrido en cualquiera de las "comunidades" de Estados Unidos, en referencia a que el ataque ha supuesto un duro golpe a la comunidad LGTB.
El agresor, ha dicho, ha atacado una sala de fiestas donde la gente "había ido a vivir, a estar con sus amigos y a disfrutar de la noche; un lugar donde la gente busca solidaridad, sentirse bien de forma conjunta y defender los derechos civiles". Esto es un recordatorio, ha insistido, "de que le puede pasar a cualquier estadounidense" por una discriminación de sexo, religión o ideología.
Ha aprovechado la ocasión para recordar que el atacante llevaba un fusil de asalto y una pistola y lo fácil que es en el país "obtener un arma" y "disparar en un colegio, una iglesia, en un cine, en una sala de fiestas o en una discoteca". "Tenemos que decidir si este es el país que queremos ser", ha dicho.
Esfuerzos puestos en determinar una vinculación con grupos terroristas
El agresor, ha dicho, ha atacado una sala de fiestas donde la gente "había ido a vivir, a estar con sus amigos y a disfrutar de la noche; un lugar donde la gente busca solidaridad, sentirse bien de forma conjunta y defender los derechos civiles". Esto es un recordatorio, ha insistido, "de que le puede pasar a cualquier estadounidense" por una discriminación de sexo, religión o ideología.
Ha aprovechado la ocasión para recordar que el atacante llevaba un fusil de asalto y una pistola y lo fácil que es en el país "obtener un arma" y "disparar en un colegio, una iglesia, en un cine, en una sala de fiestas o en una discoteca". "Tenemos que decidir si este es el país que queremos ser", ha dicho.
Esfuerzos puestos en determinar una vinculación con grupos terroristas
"Aún
no tenemos un juicio definitivo sobre las motivaciones del asesino", ha
reconocido Obama, que ha reunido este domingo con el director del FBI y
la Agencia de Seguridad Nacional, que están trabajando conjuintamente
con las agencias de seguridad locales. La investigación, ha dicho, se
encuentra en su fase inicial.
"El FBI está investigando los hechos como un acto de terrorismo", ha explicado Obama, que ha insistido en que no van a escatimar en esfuerzos "para determinar qué relación haya podido tener (el atacante) con grupos terroristas".
El presidente ha dado sus condolencias al alcalde de Orlando, Buddy Dyer, al que ha ofrecido toda la ayuda posible. Orlando ha decretado, precisamente para ello, el Estado de Emergencia.
En los próximos días se conocerán los nombres de las víctimas mortales, ha explicado Obama, que ha hablado de ellos y de "la felicidad que dieron a sus familias y sus amigos, la diferencia que marcaron en el mundo", por lo que ha prometido que los estadounidenses van a "rezar por ellos".
"Ningun acto de terrorismo o de odio va a cambiar lo que somos ni nuestros valores", ha determinado el presidente demócrata. "Ante el odio y la violencia", ha dicho", nosotros seguiremos queriéndonos los unos a nosotros y no vamos a ceder al miedo". Ha abogado por "proteger nuestra nación y nuestro pueblo".
Ha pedido a los estadounidenses preservar estos valores en lugar de "dejarse llevar por el odio que les ha llevado la vida" a las víctimas.
Obama ha querido expresar su agradecimiento a todos los agentes de policia y a los distintos servicios que "acudieron a ayudar, salvaron vidas y evitaron que la matanza fuera peor".
"El FBI está investigando los hechos como un acto de terrorismo", ha explicado Obama, que ha insistido en que no van a escatimar en esfuerzos "para determinar qué relación haya podido tener (el atacante) con grupos terroristas".
El presidente ha dado sus condolencias al alcalde de Orlando, Buddy Dyer, al que ha ofrecido toda la ayuda posible. Orlando ha decretado, precisamente para ello, el Estado de Emergencia.
En los próximos días se conocerán los nombres de las víctimas mortales, ha explicado Obama, que ha hablado de ellos y de "la felicidad que dieron a sus familias y sus amigos, la diferencia que marcaron en el mundo", por lo que ha prometido que los estadounidenses van a "rezar por ellos".
"Ningun acto de terrorismo o de odio va a cambiar lo que somos ni nuestros valores", ha determinado el presidente demócrata. "Ante el odio y la violencia", ha dicho", nosotros seguiremos queriéndonos los unos a nosotros y no vamos a ceder al miedo". Ha abogado por "proteger nuestra nación y nuestro pueblo".
Ha pedido a los estadounidenses preservar estos valores en lugar de "dejarse llevar por el odio que les ha llevado la vida" a las víctimas.
Obama ha querido expresar su agradecimiento a todos los agentes de policia y a los distintos servicios que "acudieron a ayudar, salvaron vidas y evitaron que la matanza fuera peor".