Redacción Central
Fuente. Quivo
Fuente. Quivo
MUNDO.- Los experimentos sociales realmente muestran de qué está hecha una persona.
Gracias
a ellos, pudimos ver cuán groseras son las personas con los vagabundos.
Este es otro experimento social que vale la pena recordar.
En
este experimento Josh Paler Lin actuó como un vagabundo e intentó
entrar en un restaurante de lujo. Fue rechazado un par de veces incluso
si lo único que quería era revisar el menú o si advertía que tenía
algo de dinero para pagar la comida.
Una hora después de ser rechazado, Josh volvió con su ropa blanca y limpia, conduciendo su Ferrari.
Regresó
a los elegantes restaurantes donde estaba cuando actuaba como un
mendigo y sin pensarlo dos veces, el personal de los restaurantes
inmediatamente le entregaba el menú.
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Pero
se rehusó a comer y explicó que lo habían rechazado cuando parecía un
indigente. Incluso comentó que no quería comer en un lugar donde la
gente juzga a los clientes basándose en su apariencia física.
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Entonces
los trabajadores del restaurante repentinamente corrieron hacia él
cuando estaba a punto de irse en su Ferrari, y le preguntaron si era el
que se parecía a un vagabundo que llegó antes, les dijo que sí y les
expresó que ya que no querían que la gente sucia entrara en su
establecimiento de lujo, decidió cambiar su apariencia física.
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ha registrado una situación similar para contarle al mundo lo que está
ocurriendo.
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