Por la Redacción
Tomado del Periódico Digital DominicanosHoy.com
SANTO DOMINGO. Para el presidente de la Asociación Nacional de Dueños de Farmacia, Tony Rodríguez, el comportamiento del precio de los productos farmacéuticos en 2008, fue bastante uniforme, aproximadamente un 10% menos que en años anteriores.
Rodríguez consideró que se debe a la estabilidad que alcanzó la tasa de cambio del dólar, lo cual se comportó menos irregular que en otros años, cuando los medicamentos subieron hasta un 50%.
Este trabajo es el primero, de una serie de 16, en los cuales DominicanosHoy.com analiza lo que fue el 2008 en los sectores que más inciden en la economía de la República Dominicana. También investigamos lo que pasó en algunas áreas de interés social y comunitario este año.
“También esas variaciones en los precios de nuestros productos farmacéuticos durante el 2008 y de las materias primas tienen mucho que ver con las importaciones. Es una relación directa y se añaden los factores internos que intervienen y determinan. Por ejemplo, algunos distribuidores mantuvieron desestabilizados los precios como forma de compensar el alza de los combustibles. Pero, fue una inestabilidad relativa”, agregó Toni Rodríguez.
-¿Cómo ve usted el comportamiento de los productos farmacéuticos falsificados y los grupos que funcionan como una mafia en dicha venta?
“Han habido operativos muy significativos; en las Aduanas, por ejemplo, se ha golpeado fuerte en este sentido. Los aeropuertos son puertas de entrada; pero, con una política restrictiva adecuada se va logrando que esto disminuya
“Quedan mercados muy importantes, fuera del control de las autoridades. Hablo de la zona de Moca, donde las falsificaciones de medicamentos, algunos ya vencido y de muestras médicas retiqueteadas, sigue siendo un problema”.
-¿Qué otras cuestiones considera usted que afectan los precios de los medicamentos?
“Lo competitivo, porque un mismo producto se comercializa en diferentes precios y marcas. Aunque esto depende, fundamentalmente, del distribuidor; pero, pueden oscilar las diferencias hasta en un 500% y 800% del precio real.
“Por ejemplo, una pastilla que se vende a 50 centavos, en algunos sitios cuesta hasta 5 pesos. La competitividad es muy fuerte y muchas veces las miles de marcas que varían en las farmacias establecen los precios en el mercado.
“Hay otro problema, que tiene que ver con la poca movilidad de los inventarios. En algunas farmacias se realizan tres veces al año, en otras 5 ó 6. La situación del mercado farmacéutico no es constante y en ocasiones, algunos productos presentan precios diferentes de los que exhiben en otros establecimientos. De todos modos, no debe haber manipulación, ni divergencias en los precios de las medicinas. Fíjese que, pesar de ser un mercado pequeño, la industria farmacéutica mueve de 300 a 400 millones de dólares al año”.
-¿Y podrá lograrse algún día esa estabilidad?
“Va a ser muy difícil. Nuestras economías son muy inestables y hay muchas variantes. Ahora mismo puede ser una utopía pensar que se conserven los precios de los productos farmacéuticos estables para toda la población”.
-¿Entonces, las mayorías más pobres sufren más estos vaivenes en los precios de las medicinas?
“Los precios afectan a toda la sociedad. Pero, son las autoridades y los distribuidores quienes deben tener en cuenta que una parte de la población, la más humilde, necesita precios más bajos y con un monitoreo de lo que está ocurriendo en el mercado se puede ayudar.”
-¿Qué ha hecho la Asociación que usted preside en este sentido?
“Hemos elevado denuncias a través de la prensa y a las autoridades mismas. Pero, hasta que se no se alcance una estabilidad en el mercado, no puede garantizarse nada. Insisto en que los precios de los medicamentos depende de la tasa cambiaria que afecta a todos los sectores de la sociedad, la industria farmacéutica no queda fuera de todo esto”.
Otras opiniones
Para el coordinador ejecutivo para la Reforma del Sector Salud, doctor Humberto Salazar, lograr la disminución de los costos de los medicamentos es una prioridad de la CERSS. Sostiene el funcionario que en la medida que disminuyan los precios de las medicinas, se reducen los gastos en el presupuesto del gobierno y de las familias más pobres del país, sector que considera más afectado por esta causa.
Salazar ha expresado ante la prensa nacional que el gobierno invierte tres mil millones de pesos en medicamentos para uso del sector público y ha solicitado bajar el precio para facilitar el acceso de las familias más necesitadas.
Un trabajo de la colega Julissa Lorenzo coincide con las reflexiones del presidente de la Asociación Nacional de Dueños de Farmacias, al asegurar que “las continuas alzas del dólar tienen los precios de las medicinas por las nubes (…) creando problemas de costos y beneficios en el sector farmacéutico local”.
El primer vicepresidente de la Asociación de Representantes, Agentes y Productores Farmacéuticos (ARAPF), Carlos Leroux Moya, concuerda con que el alza del dólar “es el principal problema que tienen que enfrentar día tras día, tanto los importadores, los industriales y vendedores de medicamentos en el país”.
Es bastante generalizado el criterio de contar con una industria nacional de medicamentos. Así piensa Pavel García, presidente de la Asociación de Industrias Farmacéuticas Dominicanas (INFADOMI), quien analiza que los incrementos en los precios de los medicamentos se sustentan en la competencia que representa la industria nacional.
Según García “el 50% de los medicamentos que se consumen en la República Dominicana son producidos localmente y compiten en precios y calidad con los productos farmacéuticos internacionales”.
En relación con la modalidad de la mafia en los productos farmacéuticos, el Leroux Moya, al igual que Pavel García, admiten que son insuficientes los esfuerzos de las autoridades para enfrentar la situación. “Estamos hablando de un 20 por ciento del mercado farmacéutico lesionado con unos 400 millones de pesos, como cifra muy conservadora”.
Los funcionarios aseguran que estos actos de contrabando y falsificación son denunciados y tras los operativos de incautamiento y procesamiento, muchos de los responsables no son sancionadas como se debe, en perjuicio del sector farmacéutico.
Por otra parte, los productos naturales en el país han ocupado un lugar preferencial debido a lo inaccesible de algunos precios de los químicamente elaborados. Pero, según fuentes consultadas para este trabajo, se ha reducido su uso en los últimos tiempos.
Otro concepto que sostienen algunos especialistas es que para los farmacéuticos dominicanos la entrada en vigor del Tratado de Libre Comercio con Estados Unidos, no ha favorecido a esta industria en el país. Algunos concibieron el trato como una posibilidad de generar mayor fuente de empleos e incremento de la inversión extranjera en el ramo farmacéutico; pero, sin que se afectaran los precios, ni la industria local; lo cual no se ha comportado así y muchos sectores nacionales han planteado su oposición, debido a la reducción de posibilidades para la fabricación de medicamentos locales.
El presidente de la Asociación de Representantes Agentes y productores Farmacéuticos (ARAPF), José Manuel Mallén Santos, advirtió que “existen lagunas legales importantes” y alertó a sus miembros acerca de renovaciones de contratos de distribución firmados antes del Tratado de Libre Comercio con Centroamérica y Estados Unidos (DR-CAFTA).
En cuanto al programa de lucha contra los medicamentos ilegales, Mallén recordó que el año pasado se llevaron a cabo diecisiete operativo de incautación de estos productos, cuyo valor ascendió a RD $3, 359,960.55.
Otros datos hablan de más de 23.000 productos farmacéuticos registrados en el país, de los cuales 16 por ciento son genéricos. La industria nacional cubre 49 por ciento del mercado. El gasto en medicamentos por persona se estima anualmente en unos 30 dólares, representando un total de 219 millones de dólares (7.700 millones de pesos).
Recuadro I
Según fuentes consultadas, en el país operan 150 empresas del ramo, de las cuales 39 son dominicanas. La industria farmacéutica genera alrededor de 10.000 empleos; es decir tres por ciento de la mano de obra industrial nacional y 0,3 por ciento de la población económicamente activa.
Recuadro II
Se habla de empresas extranjeras asentadas en el país, queº operan como filiales importadoras y distribuidoras, pero no producen. Dieciocho de ellas proceden de Estados Unidos y 56 de Europa. Dieciocho por ciento de las importaciones provienen de empresas estadounidenses.
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