lunes, 12 de diciembre de 2016

Dio a luz a los primeros séptuples en el mundo, te sorprenderás cuando veas cómo están ahora

Redacción Central
Fuente. Quivo

En el otoño de 1997 una tranquila costurera de Iowa, Estados Unidos, hizo historia.
Los doctores sorprendieron a Bobbi McCaughey cuando le dijeron que estaba embaraza de séptuples.

MUNDO.- Bobbi, de 29 años de edad, fue sometida a cesárea por más 40 especialistas y tuvo a los primeros bebés sobrevivientes.
Esta fue la primera vez en la historia de los Estados Unidos que una madre tenía siete bebés vivos en un solo parto.
La historia encabezó titulares en el mundo entero por el simple hecho de que todos los bebés nacieron vivos y sanos. ¡Fueron los recién nacidos más famosos de los 90. Era un milagro!
Kenny y Bobbi McCaughey captivaron al mundo. En menos de 10 minutos nacieron cuatro niños y tres niñas, el más pequeño pesó 1,11 kilos y el más grande 1,54.
A pesar de llegar prematuramente, los doctores estaban fascinados con el parto fuera un éxito.
Kenny, Kelsey, Natalie, Brandon, Alexis, Nathan y Joel fueron llamados los “Siete del Cielo”. Los padres salieron en la portada de la revista Time por su milagrosa historia y los niños han sido grabado y seguidos desde entonces.
La mujer estadounidense que ha estado más cerca de derrotarla fue la californiana Patricia Frustaci en 1985. Sin embargo, uno de los infantes nació sin vida y otros tres murieron a las tres semanas. Los otros tres tenían serios problemas médicos y de desarrollo.
Mientras su nacimiento inspiró temor y asombro en todo el mundo, también encendió un debate nacional sobre los tratamientos de fertilidad, uno que pavimento el camino para la legislación moderna.
Bobbi McCaughey tomó una droga de fertilidad luego que su marido tuviera problemas para concebir a su primer hijo, reportó el New York Times en 1997. Tomó Pergonal, una de las varias drogas que toman las parejas que quieren concebir.
Los médicos dicen que mientras más fetos tenga la mujer, más los riesgos para ellos. Riesgos que incluyen el nacer prematuros, con parálisis cerebral, daño cerebral, ceguera, retraso mental u otro problema de desarrollo en el lenguaje o habilidades motoras.
Eticistas argumentaron los séptuples de McCaughey dieron origen a preguntas muy difíciles de responder.
A la familia McCaughey les aconsejaron abortar a algunos de los fetos para aumentar las posibilidades de vidas de los otros, pero según reportó Time, “ellos dijeron tener creencias religiosas que le impedían el aborto”.
Desde entonces, el uso de tratamientos de fertilidad se ha vuelto común y el riesgo hoy en día de tener varios bebés ha bajado, según reportó la Red de Radio en EE UU.
En 2012 más de 61.000 bebés fueron concebidos con la ayuda de la fertilización in vitro en clínicas. Eso es más de los bebés nacidos en 1998, según el Centro de Control y Prevención de Enfermedades de EE UU.
Mientras los séptuples levantaron preocupaciones éticas para algunos, también obtuvieron apoyo en todo el país. Al nacer la Procter & Gamble les donó pañales de por vida. Todos entendían lo inusual y difícil de la situación de la familia McCaughey, así que mucha gente y fundaciones de caridad los ayudaron.
La familia obtuvo una casa más grande y los niños tenían comida gratis en la escuela, incluso de fueron de vacaciones. La hija mayor Mikayla, quien nació un año antes de sus hermanos, ayudó a su madre a cuidar de los niños.
El señaló a los reporteros y fotógrafos a algunos de los séptuples mientras los recibían en el aeropuerto internacional Des Moines en Iowa.
No obstante, Kenny ha trabajado duro y a sus hijos se les enseñó la importancia de obtener las cosas por sus propios medios. Durante el jardín de infancia conocieron al presidente Bush en 2002. En el liceo les ofrecieron educación universitaria gratuita de varias instituciones.
De hecho, a los siete hermanos les ofrecieron una admisión gratis en la Universidad Hannibal-LaGrange en Missouri y según una televisora local, algunos planean aceptarla.
La familia consideró mantener a los niños fuera del alcance de los medios. Eso les debió aportar carácter y fortaleza, así como bien pudieron aprovechar el dinero. Después de todo, los padres estaban emocionados de tener una gran y saludable familia. Se les veía lo enamorados que estaban de sus hijos.
Si el dinero hubiese sido un problema, sabían que se tenían entre ellos. La trayectoria de levantar a esta cría debió ser salvaje, llena de amor y risas y también un poco caótica. Todos parecen estar bien y son adultos bien educados.
“Es triste ver que las cosas acaben, pero habrá un montón de primeras veces por venir”, le dijo Bobbi al periódico.
Brandon irá a la Armada, Alexis quiere ser educador, Natalie quiere ser maestra de escuela básica, Kenny Jr. Quiere hacer carrera en la construcción, Nathan y Joel serán programadores y Kelsey canta en el coro de la iglesia y quiere ser cantante profesional.
“Honestamente pienso que les irá bien a todos siguiendo cada quien su camino”, le dijo Kenny a NBC News.
“No me preocupa el no verlos tan seguido. Los hemos tenido cerca por 19 años. Estoy listo para se
“Creo que estamos preparados y sabemos en lo que nos estamos metiendo”, añadió Kelsey.
“Nuestros padres nos han enseñado bien y de no haber sido famosos hubiésemos crecido como cualquier otra familia y tendríamos una vida normal”, dijo Kenny Jr.
En tanto que para la madre y el padre será un cambio duro para ellos. “Será difícil al principio”, dijo Kenny.
“Será extraño tener menos comida y más tiempo libre para hacer otras cosas, pero lo más extraño es no saber cómo les va en clases, los entrenamientos básicos y la preocupación diaria de su bienestar”.
Es difícil imaginar criar a siete niños. Bobbi McCaughey lo hizo y ella y su esposo levantaron a ocho hermosos niños. Parecen que hicieron un tremendo trabajo porque parecen felices y bien adaptados.
guir mi camino y creo que ellos también”.