domingo, 19 de febrero de 2017

Ve Gobierno y el PLD están “atrapados en la encrucijada de los impuestos”

El exministro de Interior y Policía Franklin Almeyda Rancier
Redacción Central

SANTO DOMINGO (EFE).- El exministro de Interior y Policía Franklin Almeyda Rancier aseguró que el Gobierno tendrá que colocarle impuestos a los ricos o aumentárselos a los pobres, al justificar la política de endeudamiento que deben asumir las autoridades para poder hacer las “grandes realizaciones”.
Opinó que el oficialista Partido de la Liberación Dominicana (PLD) está “atrapado” en el tema de los impuestos, a pesar de ser considerada una organización progresista.
Asimismo, lamentó que los grandes empresarios del país entienden que cuando hacen una inversión y “solo” se ganan el ciento por ciento, sienten como si estuvieran perdiendo.
Explicó que como consecuencia de la baja presión tributaria que recibe, el Gobierno se ve en la imperiosa necesidad de recurrir a préstamos para poder financiar los distintos programas que ejecuta.
“El PLD es ahora mismo un partido que está en el gobierno atrapado, o le impone impuesto a los ricos, o le amplía los impuestos a los pobres; si lo hace con los pobres y clase media ellos están pagando los platos rotos, y si lo hace con los ricos estos se van a sentir mal”, afirmó Almeyda en declaraciones enviadas por Héctor Herrera Cabral.
Explicó que un gobierno en una situación así, la decisión que tome va a necesitar siempre de un partido robusto, fuerte y sólido apoyándolo, y más aún cuando algunos sectores se han dado cuenta que el bloque opositor no cuaja.
Sostuvo que el Fondo Monetario Internacional puso el dedo sobre la llaga con el tema de la sostenibilidad fiscal, aunque le preocupa la recomendación de la ampliación de la base de recaudación, y por tanto hay que aumentar los ingresos.
“Qué me preocupa a mí de ese simple enunciado, que se quiere entender que es ampliar el Itbis, que es el impuesto más odioso que hay”, razonó.
Lamentó que en la República Dominicana los pobres sean quienes paguen los platos rotos, mientras que la clase media es la que paga los platos rotos que rompen la gente rica.
“De pronto entre clase media y pobre tienen que cargar con los platos rotos y buscar la comida que hay que poner en los nuevos platos, y los ricos echándose fresco”, precisó el dirigente político.