Redacción Central
PAKISTAN.- Un atentado suicida perpetrado por una facción del Taliban dejó este domingo al menos 60 muertos, la mayoría mujeres y niños, en un parque público en la oriental ciudad paquistaní de Lahore.
La explosión -que desató llamas que superaron la altura de los árboles- se produjo en el estacionamiento del parque Gulshan-e-Iqbal, cerca de los juegos para niños, precisaron autoridades.
El vocero de la facción local del Taliban conocida como Jamaat-ul-Ahrar, Ahsanullah Ahsan, dijo a The Associated Press que el atentado, que dejó más de 300 heridos, tuvo como blanco a la comunidad cristiana que había acudido al lugar a celebrar la Pascua.
La ciudad de Lahore está ubicada en Punjab, considerado el corazón político del primer ministro Nawaz Sharif y la provincia más rica del país de 190 millones de habitantes."La mayor parte de los muertos y heridos son mujeres y niños", dijo el superintendente de la policía Mustansar Feroz a Reuters. El lugar estaba atestado por las celebraciones de Pascua. Salman Rafique, un funcionario de salud de Punjab, ubicó la cifra de fallecidos en al menos 60, agregó la agencia.
Estados Unidos envió condolencias a los familiares de las víctimas. "Este acto cobarde en el que ha sido durante mucho tiempo un parque pintoresco y apacible ha matado a decenas de civiles inocentes", dijo en un comunicado el portavoz del Consejo de Seguridad Nacional de la Casa Blanca, Ned Price, citado por la agencia Efe.
El año pasado, un ministro de esa provincia y otras ocho personas murieron luego de que una bomba destruyó la casa del funcionario. Pakistán ha sido golpeado por la violencia sectaria y la vinculada a los insurgentes talibanes.
Asimismo, 15 personas murieron y 30 resultaron heridas a mediados de marzo en un atentado con bomba contra un autobús en el que viajaban empleados gubernamentales en la ciudad de Peshawar, en el noroeste del país.
PAKISTAN.- Un atentado suicida perpetrado por una facción del Taliban dejó este domingo al menos 60 muertos, la mayoría mujeres y niños, en un parque público en la oriental ciudad paquistaní de Lahore.
La explosión -que desató llamas que superaron la altura de los árboles- se produjo en el estacionamiento del parque Gulshan-e-Iqbal, cerca de los juegos para niños, precisaron autoridades.
El vocero de la facción local del Taliban conocida como Jamaat-ul-Ahrar, Ahsanullah Ahsan, dijo a The Associated Press que el atentado, que dejó más de 300 heridos, tuvo como blanco a la comunidad cristiana que había acudido al lugar a celebrar la Pascua.
La ciudad de Lahore está ubicada en Punjab, considerado el corazón político del primer ministro Nawaz Sharif y la provincia más rica del país de 190 millones de habitantes."La mayor parte de los muertos y heridos son mujeres y niños", dijo el superintendente de la policía Mustansar Feroz a Reuters. El lugar estaba atestado por las celebraciones de Pascua. Salman Rafique, un funcionario de salud de Punjab, ubicó la cifra de fallecidos en al menos 60, agregó la agencia.
Estados Unidos envió condolencias a los familiares de las víctimas. "Este acto cobarde en el que ha sido durante mucho tiempo un parque pintoresco y apacible ha matado a decenas de civiles inocentes", dijo en un comunicado el portavoz del Consejo de Seguridad Nacional de la Casa Blanca, Ned Price, citado por la agencia Efe.
El año pasado, un ministro de esa provincia y otras ocho personas murieron luego de que una bomba destruyó la casa del funcionario. Pakistán ha sido golpeado por la violencia sectaria y la vinculada a los insurgentes talibanes.
Asimismo, 15 personas murieron y 30 resultaron heridas a mediados de marzo en un atentado con bomba contra un autobús en el que viajaban empleados gubernamentales en la ciudad de Peshawar, en el noroeste del país.