Por la Redacción Central
SANTO DOMINGO. Los principales alimentos que conforman la canasta familiar no presentan bajas en sus precios, a pesar de que los combustibles han registrado más de 10 rebajas en las últimas semanas. Según un reporte de periodistas de EL NUEVO DIARIO, en el Distrito Nacional, la provincia Santo Domingo, Santiago y otras importantes ciudades, los precios de los artículos de primera necesidad siguieron subiendo durante las festividades de Nochebuena y Año Nuevo.
Desde hace un buen tiempo, el Gobierno viene reclamando a través del secretario de Industria y Comercio, que los establecimientos comerciales dispongan una rebaja sustanciosa en sus productos, ya que el petróleo, la soya y el maíz en los mercados internacionales están bajando sus costos, al igual que en los fletes marítimos y aéreos.
También se unió al llamado para que los alimentos bajen de precios, la directora ejecutiva del Instituto Nacional de Protección de los Derechos de los Consumidores (PRO-CONSUMIDOR), Carmen Meléndez, quien denunció que los consumidores son víctimas de abusos, estafas y engaños por parte de comerciantes inescrupulosos.
Meléndez dijo que ciertamente hay productos de consumo masivo cuyos precios son tan altos que no reflejan sus costos de producción.
Comerciantes de Santiago se quejan
A pocas horas de haber finalizado el 2008 e iniciarse el presente año, varios artículos subieron de precio en los mercados, colmados y supermercados establecidos en barrios, urbanizaciones y el centro de la ciudad de Santiago.
El corresponsal de El Nuevo Diario en la zona, Marcelo Peralta, pudo comprobar que entre los artículos que experimentaron alzas en sus precios figuran las sopitas, aceite, ajo, cebolla, arroz, los dulces, cigarrillos, habichuelas enlatadas y los guandules.
Además de esos incrementos en los precios, no hay estabilidad en los mismos, según un sondeo en la zona sur de esa ciudad.
Este domingo, según un reporte de Hilarión Isalguez, el empresario Marcos Pichardo, presidente de la Asociación de Mayoristas en Provisiones de la provincia de Santiago (AMAPROSAN), denunció que artículos fundamentales en la dieta del dominicano, como el arroz y la leche, han aumentado sus precios, sin que esa institución pueda hacer nada, ya que ellos son simples intermediarios entre quienes les suplen y el pueblo consumidor.
Señala el dirigente mayorista, que los socios de la institución que orienta, venden de acuerdo a como compran, que es la regla del mercado, y que si los productores, los industriales y también los importadores les suministran las mercancías a determinado precio, una vez descontados los beneficios que correspondientes, AMAPROSAN se las hace llegar a los consumidores sin ningún carácter especulativo, “puesto que lo que nos interesa es vender mucho, porque se obtiene más ganancias, no caro y que el pueblo no pueda adquirir nada o lo haga en cantidades muy limitadas”.
Expresó que el arroz continuará subiendo de precio, porque existen ciertas dificultades en ese sector, que no vislumbran que el cereal se estabilice por el momento.
En torno a la leche, indica que la misma podría continuar subiendo de precio, por las facilidades que les quitó a los importadores la Dirección General de Aduanas ( DGA ), que dirige el señor Miguel Cocco.
Sobre la oferta de otros artículos de consumo diario, Marcos Pichardo dijo que algunos han visto descender sus precios, como son los aceites, habichuelas, entre otros.
El pasado viernes el presidente de la Asociación de Detallistas de Provisiones de Santiago se quejó por los aumentos de precio en productos de primera necesidad, por lo que pidió la intervención del Gobierno a través de la Secretaría de Industria y Comercio, para evitar nuevos incrementos.
José Pascual Núñez rememoró que hace un mes el Gobierno anunció una rebaja en los precios de los productos masivos, pero que a la fecha la promesa no ha sido cumplida.
De su parte, el presidente de la Asociación de Comerciantes Mayoristas de Provisiones, Marcos Pichardo, advirtió que la situación puede empeorar, y señaló que en el caso de la leche en polvo las autoridades deben buscar alternativas para que no continúe aumentando de precio
DN y provincia Santo Domingo
En un recorrido por el Distrito Nacional y la provincia Santo Domingo, periodistas de este diario comprobaron que los alimentos básicos de los dominicanos, como son, aceite, arroz, habichuela, pollo, huevo, pan, salsa de tomate, sardinas y salami mantienen sus precios por las nubes.
En los supermercados de Plaza Lama una funda de arroz de 10 libras cuesta 200, 225 y 235 pesos, según la marca del cereal, y en un colmado la libra cuesta 26, 20 y 18 pesos; la funda de spaghetti de una libra cuesta en el supermercado 21 pesos, y en un colmado 25 pesos.
Una libra de habichuela se vende a RD$39.95 en un supermercado, mientras en los colmados se consigue en RD$36.38; la lata de leche Jumbo o familiar cuesta RD$894.95, y la leche Campesina 28 pesos.
En el supermercado Bravo de la avenida San Vicente de Paúl, una botella de aceite de una libra cuesta RD$54.95, de media libra 30 pesos, y en el colmado Jubille, en el sector Los Mina, una botella de aceite de media libra cuesta 30 pesos, un galón de 30 libras está a 249 pesos con 95 centavos.
Los cartones de huevos de 30 unidades cuesta 171.95, la lata de salsa de una onza cuesta 12 pesos con 95 centavos, la unidad del pan de agua 5 pesos y sobao 3 pesos, la libra de pollo oscila entre 48 y 44 pesos.
Los plátanos verdes se venden a 12.95 en los supermercados, en los colmados a 13 y 15 pesos; la libra de papa selecta a 32 pesos con 95 centavos, en colmados a 20 pesos, pero de menor calidad.
El gerente del supermercado Plaza Lama, Manuel Martín, dijo que la gente no sabe aprovechar el Tratado de Libre Comercio con Estados Unidos y Centroamérica (DR-CAFTA), ya que una lata de salsa importada cuesta 10 pesos, y una de manufactura local 12 pesos con 95 centavos.
“Una caja de corn flakes de la grande cuesta 219 pesos con 95 centavos, mientras uno de aquí vale 175 pesos, es que la gente no sabe comparar precios y sólo busca la marca que siempre compran, sin saber que aquí hay muchos productos que vienen de fuera y están a precios más baratos por el tratado de libre comercio”, explicó.
El propietario del colmado Ulloa, Juan Bautista Martínez, indicó que los precios se han mantenido sin rebajas porque los dueños de los almacenes no aplican rebaja en los precios de los artículos.
“Nosotros los dueños de colmados tenemos que vender a como nos venden, mira, el saco de arroz de 100 libras subió 300 pesos, ya que a final de diciembre costaba 2,000 pesos y ahora está a 2,300”, sostuvo.
