Mexicanos no pudieron impedir ejecución de Humberto Leal

Por la Redacción Central

TEXAS, EE.UU.- El mexicano Humberto Leal fue ejecutado este jueves con una inyección letal después de las 18:00 horas (tiempo de México) tras haber sido condenado en 1994 a la pena capital por el delito de violación y asesinato de una joven de 16 años, según una vocera del centro penitenciario de Huntsville.
La última esperanza que tenía Leal era que el gobernador de Texas, Rick Perry, o el Tribunal Supremo de Estados Unidos, hicieran un llamado para aplazar la condena por 30 días para que el caso fuera revisado, lo que finalmente no ocurrió. La Suprema Corte negó minutos antes supender la ejecución del mexicano.
En sus últimas palabas, el mexicano pidió perdón a la familia de su víctima.
“Siento por todo lo que he hecho. Lastimé a mucha gente”, dijo según la vocera. “Dios guarde mi vida. He aceptado su perdón, he aceptado todo (…) Lo siento, perdónenme. Realmente lo siento (...) por la gente que herido, asumo mi responsabilidad".
“¡Viva México!”, gritó al final de su discurso y luego se dirigió a un guardia: “Estoy listo guardia, hay que empezar con este show”.
El gobierno mexicano presentó hace nueve días un recurso legal apelando que a Leal se le negó el derecho a ser asistido por el consulado mexicano, con lo que hubiera tenido una defensa correcta. Argumentó que el estado de Texas no puede pasar por encima de los derechos constitucionales de un reo.
Barack Obama también intervino en el caso. Pidió que las autoridades texanas lo revisarán bajo lo determinado por la Convención de Viena, tratado internacional vinculante al que Estados Unidos está adscrito.
La Alta Comisionada de la ONU de Derechos Humanos se unió a las peticiones de clemencia del Consejo de Europa y los gobiernos de Brasil, Honduras, El Salvador y Suiza.
La Suprema Corte negó minutos antes supender la ejecución del mexicano en una dividad votación 5-4. El máximo tribunal optó por esperar a que el Congreso autorice una legislación pendiente que autoriza a cortes federales conocer de demandas similares de prisioneros extranjeros.
El Estado de Texas dijo que había pruebas determinantes para condenar a Leal. La víctima, Adria Sauceda de 16 años, tenía mordidas que correspondían a la dentadura del mexicano y además se encontró en su casa la blusa que portaba el día que fue asesinada.
La madre de Adria dijo que un detalle técnico como el acceso consular, no podía frenar la ejecución del asesino de su hija.
Finalmente Leal fue ejecutado en la penitenciaria de Texas en Huntsville casi dos horas y media después de haber tomado su última cena a las 16:00 horas. Eligió tacos de carne asada con salsa de pico de gallo —a base de cebolla y jitomate—, pollo frito y refresco de cola.