VENEZUELA.- Ante la proximidad de una cirugía que lo alejará del país en medio de la campaña electoral, el presidente Hugo Chávez buscó mostrarse fuerte físicamente, reavivó críticas a sus adversarios políticos y recibió un emotivo respaldo de sus seguidores.
Chávez, quien busca una tercera reelección y que por vez primera estará alejado físicamente de su electorado por estar obligado a someterse a una nueva cirugía, prometió a sus partidarios regresar vitalizado para enfrentar una dura contienda.
El líder izquierdista viaja este viernes a La Habana, donde se someterá a una nueva operación por una "lesión" que le apareció en el mismo lugar donde le fue extraído un tumor canceroso hace ocho meses.
En esta ocasión, a diferencia de su primera intervención quirúrgica en junio del 2011, "vamos con calma, mejor preparados, físicamente, espiritualmente y nosotros vamos a enfrentar esa nueva batalla... vamos a salir bien parados" , dijo el presidente en un mensaje a la nación transmitido por radio y televisión.
Tras una larga reunión de gabinete transmitida también al país, el presidente se desplazó al Teatro Teresa Carreño a fin de encabezar un acto político de apoyo organizado por simpatizantes.
En esa ceremonia juramentó al comando de campaña electoral con miras a los comicios generales del 7 de octubre. "Todo el pueblo venezolano; esto (el teatro) está pleno, desbordado de pasión, de frenesí... no hay espacio para la tristeza ni para el dolor" , expresó el gobernante.
El teatro, ubicado en el centro de Caracas, estaba abarrotado por unas dos mil personas que ovacionaron repetidamente al líder izquierdista.
Muchos de sus partidarios, en particular los más jóvenes, vestían camisetas en las que se podía leer: "Hugo Chávez, 2013-2019" , y gritaban consignas tales como: "Y no se va y no se va, el comandante Chávez no se va, se queda, se queda hasta el 2030" .
En medio del acto, un niño corrió hacia la tarima y Chávez lo recibió con besos y lo sentó sobre la mesa frente a él.
Chávez comenzó a leer una carta que el niño le entregó escrita por su madre, una barrendera llamada Maribel, madre de tres hijos y sin casa propia, según dijo el mandatario.
El mandatario anunció previamente durante la larga cadena por radio y televisión que el viernes por la tarde viajará a Cuba, para lo cual fue autorizado por el Legislativo en la jornada.
Según Chávez, al someterse el fin de semana pasado a controles médicos en La Habana, los especialistas le detectaron una "lesión" que es el objeto de la nueva cirugía.
Dijo que pasará su post operatorio en La Habana, pero "cuando los médicos me den luz verde me vengo... que nada se detenga, más bien que aceleremos" los programas de gobierno.
Lanzó varios mensajes de tinte electoral, descalificando a sus opositores como "la burguesía apátrida" que aspira a retornar al gobierno en las elecciones de octubre.
Pero "pase lo que pase... vamos a ganar por 'knockout''', indicó Chávez, de 57 años, quien lucia sonriente, bromeaba y gesticulaba constantemente.
