Redacción CentralFuente. Quivo
Luego de haber permanecer varios días detenido por
un abuso sexual en contra de su hija, el hombre quedó en libertad y
ahora acosa a la familia.
MUNDO.- Después de
pasar algunos días tras las rejas por violar a su propia hija, el hombre
de 60 años de edad, ahora en libertad, merodea la vivienda en Rosario,
donde habita la familia, al punto de tenerlos intimidados, así lo
asegura la esposa de la joven y madre de la víctima. La familia pide
ayuda ante la falta de medidas del estado.
Todo comenzó el pasado 5 de noviembre, cuando la madre de la víctima
regresó a casa antes de tiempo y encontró a su marido teniendo
relaciones sexuales con una de sus hijas, de 20 años, así lo asegura
Nadia, hermana de la joven violada. De inmediato, la mujer denunció el hecho ante la policía. Aunque el hombre lo negó todo, fue puesto bajo medida de aseguramiento. La denuncia quedó radicada en la comisaría 33, más tarde fue derivada a la comisaría de la mujer por tratarse de un caso de violencia de género.
El hombre que quedó en libertad al siguiente día por tener un trabajo estable y no poseer antecedentes penales, acudió de nuevo a la casa por sus cosas y a ofrecer ayuda económica, pero fue echado del lugar por cuenta del hermano mayor de la abusada.
Las dos mujeres regresaron a la comisaría a pedir
una orden de alejamiento, con todo y eso el sujeto aún las persigue y
merodea por los alrededores de la casa, hasta tal punto de tener
intimidada a la familia, es por esto que piden ayuda, porque sienten que
las medidas tomadas por la justicia no les garantiza su integridad.
La
joven, quien presuntamente se encuentra embarazada de otro chico,
señaló que guardó silencio porque su padre “la psicopateaba de una
manera que ella no podía contar nada”.
